Mucho tiempo sin escribir una palabra. Ha pasado tanto tiempo sin que plasme mis sentimientos en el papel… Y en este tiempo todo ha cambiado, absolutamente todo.
Cuando menos te lo esperas va la vida y te sorprende, y así ha sido. Cuando crees que no volverás a amar a alguien, cuando crees que tendrás que vivir de recuerdos, que pasará mucho tiempo sin que te vuelvan a temblar las piernas con un beso, sin sentir esos nervios cinco minutos antes de una cita, aparece alguien y cambia el sentido de tu vida.
Podría pasarme horas escribiendo sobre él, sobre lo que me hace sentir, sobre lo que me aporta, pero aún así, no reflejaría lo que realmente siento. A pesar de que vuelvo a saber lo que es el amor, de que vuelvo a sonreír sin motivo alguno, de que me he vuelto a sentir deseada, y he recordado el sabor de los besos, todo no es de color de rosa. Me toca sufrir de nuevo, me toca luchar por amor, contra barreras que ni sé si podré superar, contra todos y contra mi misma.
Es fácil amar, y luchar por la persona a la que amas, pero cuando sabes que no eres la única en sus pensamientos, cuando sabes que no sabe lo que quiere, no sabes por donde tirar. Porque tal vez luches inútilmente, porque tal vez luches contracorriente, por algo que tú quieres pero él no. Pero no quiero rendirme, no quiero tirar la toalla y no luchar por algo que sé que podría salir bien. Y sí, es verdad que sufro y que mis lágrimas son amargas, pero todo en esta vida tiene su recompensa, y quiero pensar que mi sufrimiento la tendrá, que en algún momento él me querrá y me deseará de la misma manera que lo hago yo.
Te amo. Es poco tiempo el que nos conocemos pero me has llenado de vida, de felicidad y por eso te quiero. A veces me dices que te quiera sólo un poco, pero quiero quererte mucho, mucho, y no solamente hoy, quiero quererte para siempre, porque tú, puedes ser el hombre de mi vida.
