lunes, 13 de diciembre de 2010

Palabras mágicas


         Hoy ha sido un día especial. Al salir del trabajo me estabas esperando debajo del paraguas sonriéndome ampliamente y acercándote a mí. El corazón ha comenzado a latirme como un loco al verte allí, esperándome a mí, solamente a mí.
Nos hemos acercado el uno al otro, y nuestras bocas se han encontrado con facilidad, como dos imanes que se unen aunque hagamos lo posible para que no lo hagan.
         Cuando tu mano se ha posado en mi cintura he contenido la respiración a la vez que tu boca jugaba sobra la mía. Y me he sentido la mujer más feliz del mundo cuando me has susurrado al oído esas palabras mágicas que tanto me gusta que me digas. “Te quiero mi niña
         Nunca me canso de oírtelo decir, y sabes que cada segundo, cada minuto, cada día, te quiero más todavía. Porque eres tú, y solamente tú, el eje de mi mundo por el que giro cada día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario